Colombia, debido a su ubicación geográfica, se encuentra en una zona de alta actividad sísmica, interactuando con las placas tectónicas Nazca, Sudamérica y Caribe. Este contexto convierte al país en un territorio propenso a registrar sismos de diversas magnitudes a lo largo del año. Recientemente, el país ha experimentado varios temblores significativos que han captado la atención tanto de autoridades como de la población.

Uno de los sismos más destacados de este año ocurrió el pasado 17 de agosto, con una magnitud de 6.1, teniendo su epicentro en El Calvario, Meta. Este sismo se sintió con gran intensidad en Bogotá y otras ciudades principales, causando preocupación y daños estructurales en algunas áreas【7†fuente】. En el Mar Caribe, otro evento notable fue un sismo de magnitud 6.3, registrado el 24 de mayo, marcando el registro más fuerte de este año hasta la fecha. Adicionalmente, el 17 de agosto se produjo otro temblor de magnitud 5.6 en Villavicencio, Meta, y el 28 de mayo, un sismo de magnitud 5.6 en Zapatoca, Santander, cerca al Nido Sísmico de Bucaramanga, fue otro de los movimientos significativos【7†fuente】.

La actividad sísmica en Colombia es monitoreada constantemente por el Servicio Geológico Colombiano (SGC), que estima un promedio de 2.500 sismos al mes en el país. Esta cifra refleja la constante necesidad de preparación y respuesta ante estos fenómenos naturales. Por ejemplo, entre el 8 y el 14 de septiembre de 2023, se registraron 591 sismos, destacándose algunos de magnitud 4.2 en Zapatoca, Santander, y magnitud 4 en Saravena, Arauca. El 14 de septiembre, dos temblores de magnitud mayor a cinco sacudieron Santander y Chocó, evidenciando la actividad sísmica continua del país【8†fuente】.

Ante la frecuencia de estos eventos, es crucial que la población esté preparada. La Unidad Nacional de Gestión del Riesgo y Desastres recomienda tener un kit de emergencias para temblores, que incluya artículos esenciales como un celular con batería adicional, papel y lapicero, navaja multiuso, kit de primeros auxilios, entre otros elementos vitales para enfrentar estos eventos【8†fuente】.

La tecnología también juega un papel importante en la preparación y respuesta ante sismos. Existen aplicaciones móviles diseñadas para alertar a los usuarios sobre la actividad sísmica, como Alertas de Google, Sismo Detector, MyShake y SkyAlert, que pueden proporcionar avisos preventivos y ayudar a las personas a prepararse adecuadamente【6†fuente】.

La realidad sísmica de Colombia demanda una atención constante y una cultura de prevención y preparación por parte de todos los sectores de la sociedad, desde las autoridades hasta cada ciudadano. La información actualizada y el uso de herramientas tecnológicas son fundamentales para minimizar los impactos de estos fenómenos naturales en el país.