México, un país con una notable actividad sísmica y volcánica, se encuentra en una ubicación geográfica que lo expone a frecuentes movimientos telúricos. Situado en el Cinturón de fuego del Pacífico, está rodeado por las placas tectónicas de Norteamérica, Cocos, Rivera y del Pacífico. Esta particular posición geológica hace que México sea uno de los países con mayor número de sismos en el mundo, registrando más de 90 eventos sísmicos anualmente con magnitudes superiores a 4.0 en la escala de Richter. Esto representa aproximadamente el 60% de toda la actividad sísmica global.

Los estados de Jalisco, Colima, Michoacán, Guerrero, Oaxaca, Puebla, Estado de México y Veracruz son identificados como las zonas de mayor riesgo sísmico en México. Estas áreas no solo tienen una alta frecuencia de sismos, sino que también son susceptibles a eventos de gran magnitud que pueden impactar significativamente en la vida de sus habitantes, incluyendo posibles efectos en la Ciudad de México.

El Servicio Sismológico Nacional (SSN), dependiente de la UNAM, es la entidad encargada de monitorear y reportar la actividad sísmica en el país. Para el día de hoy, viernes 9 de febrero, el SSN ha estado atento a la actividad sísmica, proporcionando información valiosa para la preparación y respuesta ante estos fenómenos naturales.

El SASMEX, el 9 de febrero de 2024, registró un sismo que, aunque detectado inicialmente en 4 estaciones sensoras, no ameritó un aviso de alerta para la Ciudad de México debido a que la energía del sismo pronosticaba un efecto menor en la zona.

Las regiones de Guerrero, Chiapas, Oaxaca, Michoacán, Colima, y Jalisco son conocidas por su alta sismicidad dentro de la República Mexicana. Además, estados como Veracruz, Tlaxcala, Morelos, Puebla, Nuevo León, Sonora, Baja California, Baja California Sur, y la Ciudad de México, están entre los que podrían ser más afectados por estos fenómenos.

Para obtener información detallada sobre sismología o reportar actividad sísmica, se pueden utilizar diversos canales de comunicación con el SSN, incluyendo números telefónicos y correos electrónicos específicos.

1. Identificar y Practicar Rutas de Evacuación: Conocer las salidas de emergencia y los puntos de encuentro seguros.

2. Mantener un Kit de Emergencia: Incluir artículos básicos como agua, alimentos no perecederos, linterna, baterías, botiquín de primeros auxilios, y documentos importantes.

3. Participar en Simulacros: Familiarizarse con las acciones a tomar durante y después de un sismo.

4. Informarse: Mantenerse al día con los reportes del SSN y del SASMEX para tomar decisiones informadas.

La preparación y educación son clave para enfrentar de manera efectiva los sismos en México. Conocer las zonas de mayor riesgo, seguir las actualizaciones del SSN, y tener un plan de emergencia puede hacer una gran diferencia en la seguridad personal y comunitaria ante estos impredecibles eventos naturales.