El año 2023 fue significativo para la economía chilena, marcado por ajustes profundos que lograron una notable reducción de la inflación. A pesar de estas medidas, el país evitó caer en una recesión, según indicó el ministro de Hacienda chileno, Mario Marcel.

En diciembre de 2023, Chile experimentó una caída del 1% en su actividad económica en comparación con diciembre de 2022. Esta información fue proporcionada por el Banco Central de Chile, entidad que juega un papel crucial en la economía del principal productor de cobre del mundo.

El Índice Mensual de Actividad Económica (Imacec), que abarca alrededor del 90% de los bienes y servicios del país, mostró un retroceso inesperado. Este índice es considerado un indicador adelantado del Producto Bruto Interno (PBI).

La caída en el Imacec de diciembre se atribuyó principalmente a la disminución en la producción de bienes y el comercio, que registraron descensos del 3.2% y 3.8%, respectivamente. Contrariamente, el sector de servicios mostró un aumento del 1.8%, impulsado en gran medida por el transporte.

A pesar del retroceso en diciembre, el PBI de Chile se estima que cerró el año 2023 con una caída de tan solo 0.2%, lo cual es notable considerando las expectativas de crecimiento nulo por parte del Gobierno y diversos organismos internacionales.

Chile mostró una recuperación rápida post-pandemia, con un crecimiento histórico del PBI de 11.7% en 2021. Sin embargo, este impulso comenzó a desacelerarse en 2022, cerrando el año con un crecimiento del 2.4%.

En términos de inflación, el país cerró el año 2023 con un 3.9%, manteniendo la inflación contenida. En el ámbito de la política monetaria, se ha observado un agresivo recorte de los tipos de interés, pasando de un máximo histórico de 11.25% a 7.25% actualmente.

Mirando hacia el futuro, las perspectivas para 2024 son cautelosamente optimistas. La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) y el Fondo Monetario Internacional (FMI) estiman un crecimiento del PBI chileno alrededor del 1.8% para este año. El Gobierno chileno, por su parte, proyecta una posible expansión de hasta el 2.5%.

El año 2023 fue un período de ajuste significativo para la economía chilena, marcado por una gestión eficaz de la inflación y evitando una recesión profunda. Con una inflación controlada y una política monetaria enfocada en el estímulo económico, Chile se enfrenta al desafío de reactivar su crecimiento en 2024. Los indicadores sugieren un panorama de recuperación moderada, con la atención puesta en la evolución de los sectores productivos y las políticas económicas implementadas.