El año 2024 en Perú lleva el nombre oficial de "Año del Bicentenario, de la consolidación de nuestra Independencia, y de la conmemoración de las heroicas batallas de Junín y Ayacucho". Este título, establecido mediante el decreto supremo N.º 129-2023-PCM y publicado en el diario oficial El Peruano, tiene un significado profundo y conmemorativo.

La elección de este nombre está enraizada en la historia peruana. En 2024, Perú se aproxima a la conmemoración de los 200 años de la consolidación de su proceso de independencia, un hito alcanzado gracias a las victorias en las batallas de Junín y Ayacucho. Estos eventos fueron cruciales no solo para Perú sino para toda Hispanoamérica, marcando un punto de inflexión en la lucha por la independencia de la región. Por lo tanto, el nombre del año 2024 no solo celebra un aniversario significativo sino que también reconoce la importancia histórica de estos sucesos.

Es interesante notar que el 31 de diciembre de 2024 marcará el fin de la etapa oficial de conmemoración del bicentenario de la independencia del Perú. Además, el gobierno peruano ha tomado la iniciativa de traducir esta denominación a las lenguas indígenas y originarias del país, una tarea asignada al Ministerio de Cultura. Esta decisión refleja un reconocimiento y una inclusión de la diversidad cultural y lingüística del Perú.

En cuanto al año 2023, fue nombrado como el "Año de la unidad, la paz y el desarrollo". Esta denominación, elegida por el gobierno de la presidenta Dina Boluarte, refleja la agenda social y las circunstancias del país en ese momento. En el contexto de una crisis social que enfrentaba el Perú a finales de 2022 y principios de 2023, este nombre buscaba promover la unidad y el progreso en un periodo desafiante.

El proceso de nombrar los años en Perú se remonta al 7 de diciembre de 1962, cuando se dictó que 1963 sería el "Año de la Alfabetización". Desde entonces, con algunas excepciones, cada año ha llevado un nombre oficial, reflejando generalmente temas de relevancia nacional, ya sea en el ámbito educativo, social, económico, o político. Estos nombres son obligatorios en los documentos oficiales del Estado peruano, sirviendo como un recordatorio constante de los objetivos y desafíos nacionales para ese año en particular.

la práctica de nombrar los años en Perú es más que una mera formalidad; es una expresión de los valores, las aspiraciones y la historia del país. Cada nombre seleccionado refleja una parte de la identidad peruana y sirve como un recordatorio de lo que la nación busca lograr o conmemorar en ese año.