El panorama político en Venezuela se ha vuelto aún más complejo tras la reciente decisión del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), que ratificó la inhabilitación de la política opositora María Corina Machado para las elecciones presidenciales de este año. Esta situación ha llevado al Departamento de Estado de Estados Unidos a anunciar una revisión de su política de sanciones contra el gobierno de Nicolás Maduro. 

María Corina Machado, una destacada figura de la oposición venezolana, ha sido declarada inelegible por el TSJ, acusada de participar en actos de corrupción ligados al exjefe del Parlamento Juan Guaidó. Esta decisión ha generado controversia, tanto a nivel nacional como internacional, debido a la popularidad de Machado, quien obtuvo el 92% de los votos en las primarias de la oposición. 

La decisión del TSJ ha sido calificada por Matthew Miller, portavoz del Departamento de Estado de EE. UU., como "profundamente preocupante". Esto se debe a que contradice los acuerdos alcanzados en Barbados, donde se estableció el compromiso del gobierno de Maduro de permitir elecciones libres y justas.

Tras el acuerdo de Barbados, mediado por Noruega, EE. UU. había reducido las sanciones petroleras impuestas a Venezuela. Este alivio temporal buscaba apoyar los esfuerzos diplomáticos para establecer un cronograma electoral y revisar las inhabilitaciones políticas. Sin embargo, la reciente inhabilitación de Machado y otros miembros de la oposición ha llevado a Estados Unidos a reconsiderar su enfoque sancionador.

El presidente Nicolás Maduro ha acusado a la oposición de incumplir el acuerdo de Barbados, alegando su participación en "cinco conspiraciones", incluyendo intentos de asesinato. El oficialismo mantiene su disposición al diálogo, pero insiste en que la oposición debe cumplir con lo pactado, renunciando a la violencia y respetando la legalidad.

La coalición opositora venezolana, liderada por Voluntad Popular y Un Nuevo Tiempo, ha rechazado la decisión del TSJ, calificándola de "inconstitucional". Sostienen que una elección sin la participación de Machado no sería libre ni justa. La Iniciativa Democrática de España y las Américas (IDEA), compuesta por exmandatarios latinoamericanos, ha expresado su apoyo a Machado, considerándola la "legítima representante de la oposición en Venezuela".

Este complejo escenario político en Venezuela plantea serios desafíos tanto para la democracia interna como para las relaciones internacionales. La inhabilitación de Machado y la respuesta de Estados Unidos, junto con las acusaciones mutuas entre gobierno y oposición, reflejan una profunda división y la dificultad de alcanzar un consenso político. La comunidad internacional observa atentamente el desarrollo de estos acontecimientos, en un país marcado por una crisis política y económica prolongada. 

Este artículo se centra exclusivamente en el tema de las sanciones de EE. UU. y la situación política en Venezuela. No aborda otros temas no relacionados, como los incendios forestales en Colombia.