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En una reciente sesión del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, Haití ha emitido un llamado urgente para el pronto despliegue de una misión multinacional, liderada por Kenia, con el objetivo de frenar la ola de violencia que azota al país. El ministro de Relaciones Exteriores y Culto de Haití, Jean Victor Geneus, describió la situación actual del país caribeño como un "infierno" cotidiano, enfatizando que la población haitiana está llegando a su límite.

La violencia en Haití ha alcanzado niveles alarmantes, con un incremento significativo en los homicidios en comparación con el año anterior. Jean Victor Geneus destacó que, en promedio, una persona muere cada dos horas en Haití, una estadística que refleja la gravedad y urgencia de la situación.

La representante especial del secretario general de la ONU en Haití, María Isabel Salvador, también intervino, señalando una escalada en la violencia perpetrada por bandas armadas, que no solo han intensificado sus acciones violentas sino que también han recurrido al uso sistemático de la violencia sexual contra mujeres y niñas como método de control y dominación.

Ante este panorama desolador, la delegación de Kenia, encargada de liderar la misión multinacional, ha subrayado los avances en los preparativos para su despliegue. Sin embargo, la urgencia de la situación se ve exacerbada por la demora en la implementación de la misión, una preocupación expresada por el ministro de Exteriores de República Dominicana, Roberto Álvarez, quien advirtió sobre el abismo al que se enfrenta Haití.

En la misma sesión, se hizo hincapié en la necesidad de abordar el problema del tráfico de armas y municiones hacia Haití. La directora ejecutiva de la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC), Ghada Fathi Wali, llamó a fortalecer las capacidades de control aduanero y vigilancia de las fronteras, así como a mejorar el intercambio de información y la vigilancia de los vuelos internacionales.

La situación en Haití no solo es una crisis de seguridad sino también humanitaria. Tirana Hassan, directora ejecutiva de Human Rights Watch, alertó sobre los niveles alarmantes de violencia y la grave crisis alimentaria que enfrenta el país, exacerbada por la interferencia de grupos criminales en la entrega de asistencia humanitaria.

Este escenario en Haití presenta un desafío monumental y requiere una respuesta internacional inmediata y efectiva. La comunidad internacional, con la misión multinacional a la vanguardia, debe actuar con decisión y celeridad para restaurar la seguridad y estabilidad en Haití, y abrir camino hacia un futuro más esperanzador para su población.

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