En la 54ª reunión anual del Foro Económico Mundial de Davos, el presidente de España y secretario general del Partido Socialista Obrero Español (PSOE), Pedro Sánchez, hizo eco de su compromiso con la prosperidad de los ciudadanos en un contexto global marcado por retos políticos, económicos y sociales. En contraste con las declaraciones del líder libertario argentino Javier Milei, quien expresó preocupación por un supuesto desvío de Occidente hacia políticas que conducen al socialismo y la pobreza, Sánchez defendió las políticas implementadas por su administración y desafió la eficacia de las posturas neoliberales.

Sánchez criticó la idea de reducir el tamaño del sector público y dejar a los ciudadanos y a las pequeñas empresas desamparados frente a los desafíos económicos y sociales. En su discurso, subrayó el auge de la extrema derecha como un indicador de problemas más profundos en la sociedad, problemas que, según él, requieren de una respuesta integral y cohesiva que involucre al estado como un actor clave.

El mandatario español destacó los logros de su gobierno, incluyendo el aumento del salario mínimo en un 54%, la ampliación de los derechos laborales y la reducción de la temporalidad, la desigualdad y la pobreza. Estos avances, según Sánchez, son prueba de que es posible generar riqueza y mejorar las condiciones de vida de los trabajadores al mismo tiempo.

Además de abordar temas económicos, Pedro Sánchez tocó asuntos de relevancia global, como la guerra en Europa y Medio Oriente. Subrayó la importancia de alcanzar la estabilidad mundial y señaló que los conflictos en Ucrania y Gaza son decisivos en este sentido. Hizo un llamado urgente a un alto al fuego inmediato y propuso la convocatoria de una conferencia internacional para encontrar una solución definitiva a estos conflictos.

Sánchez también abordó la necesidad de establecer marcos regulatorios en torno a la Inteligencia Artificial, enfatizando la importancia de priorizar los derechos fundamentales de los ciudadanos por encima de los intereses de estados y corporaciones. En un mundo cada vez más digitalizado, advirtió sobre los riesgos de confiar ciegamente en lo que denominó la "mano invisible" de la Inteligencia Artificial. Subrayó la importancia de las acciones humanas y tangibles, aquellas realizadas por personas reales en su vida cotidiana, y resaltó la importancia de confiar en la humanidad y la solidaridad como pilares fundamentales de la sociedad.

el discurso de Pedro Sánchez en el Foro de Davos fue una defensa robusta de las políticas progresistas y una crítica a las tendencias neoliberales y de extrema derecha, enmarcada en un llamado a la acción para enfrentar los desafíos actuales, desde conflictos internacionales hasta la evolución de la tecnología. Con estas declaraciones, Sánchez no solo delineó la posición de España en el tablero político y económico mundial, sino que también enfatizó la importancia de una visión de futuro centrada en la prosperidad, la paz y el respeto a los derechos fundamentales en la era de la Inteligencia Artificial.