En el documental ‘Miércoles 15.30. Memorias de una Ausencia’, dirigido por Fernando Chomali, actual arzobispo de Santiago de Chile, se aborda un tema de profundo impacto humano y social: las secuelas de la dictadura de Augusto Pinochet. Este trabajo no es solo un registro histórico, sino una iniciativa valiente que busca mantener viva la memoria de las víctimas de este oscuro periodo en Chile. A través de los testimonios de familias que aún buscan a sus seres queridos desaparecidos, el documental invita a reflexionar sobre la importancia de confrontar el pasado para construir un futuro más justo y empático.

En contraste con la iniciativa chilena, la historia de España presenta una narrativa diferente respecto al tratamiento de las víctimas de regímenes autoritarios. Desde la Guerra Civil Española, ha habido esfuerzos continuos por investigar y honrar a los muertos del conflicto. Sin embargo, la Iglesia española ha mostrado una actitud más reservada en este aspecto, especialmente en lo que respecta a reconocer y recordar a los católicos que fueron perseguidos por sus ideales republicanos. A diferencia de la Iglesia vasca, que ha reconocido a las víctimas del franquismo, la institución en el resto de España no ha abordado de manera significativa el rescate de la memoria de aquellos católicos que sufrieron persecución, ejecuciones sumarias, purgas laborales, marginación o exilio.

El documental chileno y la situación en España presentan una oportunidad para la Iglesia y la sociedad en general de sentarse a escuchar y reflexionar sobre su pasado. El silencio y la omisión no solo perpetúan la injusticia, sino que también impiden la curación de las heridas históricas. Es esencial reconocer que el rescate de la memoria histórica es un proceso continuo y necesario, que involucra no solo la exhumación de restos sino también la reivindicación de la dignidad y la verdad.

La Iglesia, en su rol de líder moral y espiritual, tiene la responsabilidad de abordar estas cuestiones difíciles. Como bien señala la doctrina católica, la comunión con los santos y los mártires es un proceso que trasciende el tiempo y las generaciones. La reivindicación de la memoria de aquellos que sufrieron injusticias es un acto de fe y un compromiso con la justicia y la verdad.

El documental 'Miércoles 15.30. Memorias de una Ausencia' es un recordatorio potente de la importancia de la memoria histórica. Al mismo tiempo, la situación en España subraya la necesidad de un enfoque más inclusivo y comprensivo hacia todas las víctimas de regímenes opresivos. La historia no solo debe ser recordada, sino también entendida y procesada para garantizar que las lecciones del pasado informen y mejoren nuestro presente y futuro.

este documental y la reflexión sobre la situación en España nos invitan a todos, especialmente a instituciones como la Iglesia, a comprometernos con la verdad y la justicia, reconociendo y honrando a todas las víctimas de la historia, independientemente de sus creencias o ideologías. Esta es una tarea que no solo corresponde a las generaciones pasadas, sino también a las presentes y futuras.