El próximo domingo, España celebra el Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia, una fecha clave establecida por la ONU en 2015, con el propósito de reconocer y potenciar el papel de las mujeres en la ciencia y la tecnología. Este día no solo honra las contribuciones femeninas en los campos STEM (Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas), sino que también busca promover su participación plena y equitativa en estas disciplinas y fomentar el surgimiento de nuevas vocaciones.

En un esfuerzo por destacar la importancia de la igualdad de género en el sector científico, instituciones a lo largo de todo el país han organizado una amplia gama de actividades. Desde charlas y talleres hasta exposiciones y proyecciones de documentales, estas iniciativas están diseñadas para inspirar y educar, no solo a las mujeres y niñas, sino a la sociedad en general, sobre la valiosa contribución femenina en la ciencia y la necesidad de un cambio hacia un futuro más inclusivo.

La Federación Española de Centros Tecnológicos (FEDIT) y diversas personalidades del ámbito científico, como la ministra de Ciencia, Innovación y Universidades, Diana Morant, y la presidenta de FEDIT, Laura Olcina, han resaltado la importancia de incluir a las mujeres en la ciencia y tecnología. Se subraya el progreso realizado hasta la fecha, con un incremento notable en la representación femenina dentro de los centros tecnológicos y en roles de liderazgo científico. Sin embargo, también se reconoce la existencia de un déficit femenino en estos campos, lo que señala la necesidad de seguir trabajando en estrategias que promuevan la equidad de género en STEM.

FEDIT y sus afiliados promueven activamente la participación de las niñas en carreras STEAM (Ciencia, Tecnología, Ingeniería, Artes y Matemáticas) como medio para combatir el déficit femenino en estos sectores. Estas acciones están fundamentadas en la creencia de que el talento no tiene género y que la diversidad es esencial para el avance de la ciencia y la tecnología. La apuesta por equipos plurales y diversos no solo es justa, sino que es crucial para el desarrollo de innovaciones que beneficien a toda la sociedad.

Un aspecto destacado es que la pasión por la ciencia y la tecnología no tiene límites de edad, lo que abre la puerta a oportunidades de formación y reconversión profesional para mujeres en cualquier etapa de su vida. Ana de Córdoba es un ejemplo inspirador de cómo nunca es tarde para seguir una vocación en el ámbito STEM, demostrando que la flexibilidad de estas disciplinas permite el desarrollo de habilidades y la exploración de nuevas carreras en momentos inesperados.

La celebración de este día se ha extendido a lo largo de la semana, con una serie de eventos organizados por el Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades, el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), y otras instituciones. Estas actividades no solo buscan aumentar la visibilidad de las mujeres en la ciencia y promover el interés por estas áreas entre las jóvenes, sino también desafiar los estereotipos y barreras que aún enfrentan las mujeres en el campo STEM.

El Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia es una oportunidad para reflexionar sobre los logros alcanzados y los desafíos pendientes en la búsqueda de la igualdad de género en la ciencia y la tecnología. A través de la educación, la visibilidad y el apoyo continuo, podemos asegurar un futuro donde el talento, sin importar el género, sea reconocido y valorado en todas las áreas de la ciencia y la innovación.