México se prepara para afrontar las condiciones climáticas adversas provocadas por el frente frío número 27 este jueves 18 de enero. Según la Comisión Nacional del Agua (Conagua), este fenómeno, que se posicionaría de manera estacionaria sobre la Península de Yucatán y el sureste del país, traerá consigo una masa de aire ártico y la influencia de la corriente en chorro subtropical. Estos factores climáticos se combinan para crear un escenario de intensas lluvias y fuertes vientos en diversas regiones.

Las áreas más impactadas incluirán regiones de Chiapas, Tabasco y Veracruz, donde se esperan lluvias puntuales muy fuertes. Asimismo, Campeche, Oaxaca, Quintana Roo, Yucatán y Puebla no se quedan atrás, anticipándose fuertes precipitaciones y chubascos respectivamente. Pero eso no es todo, la masa de aire ártico provocará un evento conocido como el Norte, caracterizado por vientos muy fuertes a intensos, alcanzando velocidades de entre 80 y 100 km/h en el Istmo de Tehuantepec y oleajes de 2 a 4 metros en el Golfo de Tehuantepec y la costa sur de Veracruz. Otras áreas como el litoral de Tamaulipas también experimentarán rachas de viento y oleaje significativos.

La situación amerita precaución, ya que las intensas lluvias podrían desencadenar fenómenos como deslaves, incrementos en los niveles de ríos y arroyos, y hasta desbordamientos e inundaciones en zonas bajas. Por ello, se hace un llamado a la población a estar atenta a los avisos emitidos por el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) y seguir las directrices de Protección Civil para salvaguardar su bienestar.

Paralelamente, el norte de México se enfrentará a un ambiente frío a gélido durante la mañana, con temperaturas mínimas que oscilan entre los -10 y -5 grados Celsius, especialmente en sierras de estados como Chihuahua, Coahuila, Durango, Nuevo León y Tamaulipas. Otras regiones, aunque no tan extremas, también experimentarán temperaturas bajas y heladas. Además, se prevé la posibilidad de caída de nieve o aguanieve en los picos más altos de volcanes como el Pico de Orizaba y el Cofre de Perote.

Este frente frío número 27 presenta un panorama complejo y diverso en términos climáticos para México. Desde intensas lluvias y fuertes vientos en el sureste y la Península de Yucatán, hasta condiciones gélidas en el norte, este fenómeno exige una respuesta cuidadosa y preparada por parte de las autoridades y la población. La vigilancia y adherencia a las recomendaciones de las autoridades meteorológicas y de Protección Civil son clave para navegar este evento de manera segura.